Crónica de la participación en el 1er Ibagué Bike Week 2007

Crónica de la participación en el 1er Ibagué Bike Week 2007

Por Nelson Ricardo Maldonado Q. (Fusagasuga – Colombia)

29 de Mayo de 2007.

El líder de los Hell’s Angels aun vive. Se llama SONY BARGER y dio la siguiente definición de AMOR: “Es el sentimiento que tienes cuando te gusta alguna cosa tanto como tu motocicleta”.

El pasado fin de semana del 18 al 21 de mayo le llegó el turno a la ciudad musical de Colombia (Ibagué), para celebrar por primera vez el bike week.

Esta vez, las calles de la bella ciudad no se vieron invadidas por carrozas y comparsas danzando al son del glorioso BUNDE tolimense, como en las ya famosas fiestas del San Pedro. Esta vez la oportunidad fue para los caballeros del asfalto, quienes en sus ensordecedoras máquinas y sus cuerpos cubiertos de armaduras de cuero negras y un sin fin de accesorios, se tomaron las principales calles y avenidas de esta acogedora ciudad.

El punto de encuentro no podría ser mejor, pues las majestuosas y amplias instalaciones del centro comercial MULTICENTRO fueron las encargadas de recibir a las poco más de 250 motocicletas y a sus raudos e incansables guerreros; aunque a su vez también sirvió de excusa para ser el sitio de reunión de cientos de ibaguereños que se apilaron en las esquinas y plazoletas con sus cámaras fotográficas para registrar y dejar un recuerdo para la posteridad de tan gran evento.

La jornada comenzó con una calurosa y amigable recepción y bienvenida a todos los participantes por parte de la junta organizadora, quienes en su gran mayoría eran integrantes de PIJAOS MOTOR CLUB. Acto seguido se hicieron entregas de manillas y souvenirs a los inscritos al evento; hecho esto, solo se escucho el rugir de los motores; la adrenalina y la rumba se tomaron por completo a Ibagué.

  

El sábado 19 algunos amanecidos y otros recién llegados, pero todos partimos hacia el municipio de Venadillo; hubo de todo, paseo en chiva, tamal tolimense, cuarto de milla náutico, una verdadera novedad donde los diferentes clubes de motociclistas se midieron en un cuarto de milla en bicicleta acuática que a la larga no arrojo un ganador sino mucha diversión que es lo más importante.

En la noche se llevó a cabo una gran rumba en la discoteca MARIA MENTIRA con Dj’s en vivo, show de reguetón, camisetas mojadas, stripers tanto para ellas como para ellos; pero lo que más llamó la atención fue la llegada de nuestros bikers que no fue tan ruidosa y apoteósica como suele ser; esta vez se caracterizó por la sobriedad y sobre todo el compromiso de no revolver gasolina con licor, pues uno a uno, club por club fueron llegando en taxis, carros particulares, microbuses alquilados, etc. Lo importante era llegar y disfrutar al máximo de esta buena rumba.

La noche seguía su curso y la rumba se empezó a prender aún mas cuando de la barra empezaron a desfilar cinco lindas chicas que al ritmo de reguetón hicieron retumbar el suelo de este establecimiento, pues al ritmo de sus caderas y de sus armoniosos cuerpos se dio el desenfreno total y un buen augurio de lo que venía mas adelante.

   

Sin temor a equivocarnos lo que se vio mas allá fue un muy buen espectáculo de camisetas mojadas, que se determinó por el muy buen comportamiento de los hombres y el disfrute total sin ningún tipo de atropello a las chicas participantes; las que si vivieron un desenfreno total y absoluto fueron las mujeres pues no esperaron la salida del striper cuando ya estaban montadas sobre la barra bailando y disfrutándose el furor del momento, al punto que al unísono grito de: “QUE SE PELE, QUE SE PELE” dejaron entrever la faceta lujuriosa que todos llevamos dentro; al fin del cuento este personaje enmascarado mostró sus carnes y toda su humanidad fue poseída por improvisadas bailarinas salidas del público que no dudaron en tocar, palpar y hasta cachetear las nalgas y ver que este incesante bailarín estaba como decían ellas “RICO PA’ HECHARSELO AL PICO”. En fin el derroche de energía y de picante lo remató una hermosa bailarina que por momentos dejo volar nuestra imaginación y nos hizo llegar a ese limbo paradisíaco donde la mayoría de los hombres hemos querido llegar y que en compañía de ropa interior rosa y de un sobrio striptease remató la noche como debía ser.

Así culminó la rumba en María Mentira, donde todo pasó como una mentira pues nunca habíamos visto hombres tan sobrios y respetuosos y mujeres tan desbordadas y derrochadoras de energía, así pues acababa el día número dos de este buen encuentro.

   

El día número tres arrancó con una muy buena caravana hacia el pueblo de Ambalema, donde nos recibieron con voladores, pitos y matracas pues no se había visto semejante espectáculo por las calles después de las elecciones gubernamentales; allí nos esperaba un buen plato de lechona acompañado de una y bien merecida gaseosa fría y por supuesto la infaltable FRIA con pedacitos de escarcha de hielo en su interior, pues el calor y el abraso del sol eran infernales; una vez almorzados, se vieron bailes típicos de la región ejecutados con gran maestría y coordinación por los niños de la escuela municipal, quienes alegraron el rato y nos hicieron recordar lo bueno que tiene nuestro país. Después de degustar la gastronomía de la zona no podía faltar el viaje en ferry por las aguas de nuestro río insignia a nivel mundial y arteria fluvial años atrás por donde llegó el progreso a nuestro país, si; estoy hablando del hoy en día abandonado y contaminado río MAGDALENA, que por un momento nos hizo olvidar de nuestras motos y de los 94 kilómetros recorridos para llegar a este bello puerto.

  

Ya para finalizar solo me resta darle las gracias a la junta organizadora, a Jaime Bravo y a todos los Pijaos Bikers porque en verdad le cumplieron al evento, a todos los participantes, a la gente de Ibagué y a zona biker.

Espero verlos en el próximo, encuentro al cual espero que me inviten.

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