Yellow Skull – Una chopper al más puro estilo setentero

Yellow Skull – Una chopper al más puro estilo setentero

Por Juan Pablo Martínez V. (Bucaramanga – Colombia)

4 de Junio de 2007.

Cuando los soldados que participaron de la segunda guerra mundial regresaron a sus casas, comenzaron a formar grupos en torno a las motocicletas para sentir la camaradería que tenían en la milicia. Estos nuevos “motociclistas” (un término novedoso en ese tiempo) empezaron a cortar (“chop” en inglés) removiendo o cortando partes innecesarias de sus motos. Esto hizo que las motos tuviesen un mejor aspecto visual. Esta revolución en el aspecto de las Harley Davidson de la época, dio origen al concepto de moto chopper y de paso absorbieron muchos de los elementos visuales que se usaban en la milicia durante la guerra; así fue como las calaveras, las cruces de malta, las águilas y todos estos elementos se fueron haciendo comunes en este mundo del custom.

En 1969, Peter Fonda, Dennis Hopper, Jack Nicolson y Karen Black protagonizaron uno de los filmes más famosos de la historia del cine; en “EASY RIDERS” realizamos un verdadero viaje de la mano de Billy y Wiatt, más conocido como el Capitán América, quienes cruzaron Estados Unidos desde Los Ángeles hasta Nueva Orleáns en sus personalizadas chopper, viviendo un mundo de aventuras y experimentando la libertad de conducir sus espectaculares máquinas por el desierto norteamericano.

Esta es la inspiración, sino de muchos, por lo menos lo es para Marcelo, el propietario de esta impecable custom, al más puro estilo de las choppers de finales de los años 60 y representantes de la década del 70.

 

Esta increíble motocicleta fue la ganadora del premio a la mejor moto custom del pasado encuentro Harley Davidson Bogotá 2006, acreedora a tres cambios de aceite en la tienda Harley de Bogotá y en lo que a ZONA BIKER se refiere, digna representante del talento nacional.

La base tomada para realizar esta magnífica custom fue una Harley Davidson Springer Softail, en la cual se practicaron modificaciones que van desde la altura y el largo entre ejes, hasta un trabajo de pintura que raya en lo obsesivo por la perfección en los detalles.

Comencemos por decir que el ángulo de inclinación de la horquilla se cambió a 43°, el motor se modificó a modelo 1992; se instaló un manillar personalizado, farola en forma de bala, una horquilla tipo Springer modificada en los laterales, punteras en todos los tornillos y unas increíbles palancas de embrague y freno que hacen juego con los espejos redondos y los puños.

El depósito de combustible se fabricó completamente; se modificaron los guardabarros, el sillín, el respaldo del pasajero, los reposapiés, las palancas de los cambios y el freno, la pata de cabra y un sin fin de detalles que llenan esta motocicleta de piezas personalizadas que la hacen no solo única sino una verdadera obra de arte, una oda a la vida; esto es lo que Marcelo quiere representar con las calaveras que cubren la motocicleta de eje a eje, sin dejar un solo lugar sin presencia de ellas.

  

Las calaveras que acompañan cada pieza de esta motocicleta son increíbles, las puedes ver en la tapa del depósito de combustible, en las tapas del motor, en los costados de la horquilla (que además traen una luz roja en los ojos), en los reposapiés y sobre todo en el asombroso trabajo de pintura que han realizado sobre esta máquina. Dos ángeles, un guardián y a sus pies miles de calaveras; no puedo decirles mucho más, prefiero que las imágenes hablen por si solas.

  

Marcelo fabricó esta motocicleta de punta a punta, con sus propias manos en su taller “MARCELO ALI CHOPPERS” en Bogotá, le tomó cinco meses llegar al resultado final, un presupuesto de entre siete y ocho millones de pesos; las calaveras que se pueden apreciar en la moto fueron confeccionadas por él en su gran mayoría. Ha recorrido en su custom casi todo Colombia y es otro de los grandes constructores que encontramos en nuestro país; adentrarse en su taller es como viajar a la tierra de Oz, un mundo mágico donde los sueños de los bikers se hacen realidad y se materializan en customizaciones únicas e irrepetibles que permiten a sus dueños expresar sus más íntimos deseos.