Crónica del 5to Gran Encuentro Motos Alta Cilindrada San Cristóbal – Táchira 2011

Quien se invento las fronteras… se olvido que existimos los motociclistas.

Por Javier Goyes (Ecuador)

Motociclistas de Venezuela, Colombia, Ecuador y Canadá nuevamente juntos en otro moto-evento, esta vez el encuentro fue en San Cristóbal – Táchira. El denominado 5to encuentro de Motos de Alta Cilindrada; fue una experiencia única que quizá ninguno de los motociclistas que se respete deba perderse.

Y es que definitivamente quien asista a un evento de motociclistas en cualquier parte del mundo debe tener la predisposición y buena energía para disfrutar desde el momento que planifica, emprende el viaje , disfruta del evento motero y regresa a su hogar  sano y salvo, luego de haber cosechado en su camino una cantidad y calidad inigualable de amigos. Esa es la manera de vivir un evento “Disfrutándolo al máximo“.

La Moto aventura comienza un mes atrás, cuando varios de los asistentes al Primer Sudamericano de la Hermandad Motera en Bucaramanga recibimos la invitación a para asistir del evento a celebrarse en “La Ciudad de la Cordialidad” San Cristóbal en Venezuela y decidimos realizar este viaje. Allí estábamos cinco motociclistas de Bucaramanga de los clubes “Renegados” y “Fariseos” y dos motos del extranjero, una canadiense y una ecuatoriana, un total de siete motos emprendimos el viaje hacia el Norte, destino final: San Cristóbal.

El primer tramo de la ruta  Bucaramanga – Pamplona – Cúcuta fue acompañado de lluvia casi permanente, frio que congelaba los huesos, neblina  y cuatro derrumbes  que convirtieron el corto tramo en un recorrido de casi 9 horas y es que el invierno que está golpeando fuertemente a la bella Colombia causo estragos en varios tramos de  la vía, interrumpiendo el paso por la misma. Afortunadamente la valiosa compañía de experimentados motociclistas de Santander hizo del viaje una ruta segura, con paisajes fríos pero hermosos, y comida muy agradable en el camino.

Una vez en la frontera, y respetando  leyes de cada país, empezamos los trámites para el ingreso de los pilotos y de las motos. En este punto empezó una segunda aventura; una aventura de trámites dentro aduanas venezolanas SENIAT, y es que lastimosamente para el grupo, los trámites en  esta institución demoraron casi siete largas horas.  La intención de este texto no es quejarse de estas demoras burocráticas, pero sí de recomendar a las personas que vayan a cruzar desde Colombia hacia Venezuela que tengan los siguientes requisitos, para minimizar los retardos en el viaje: Documentos de la motocicleta, documento del piloto, SOAT venezolano (se recomienda comprarlo en San Antonio), pasaporte sellado (verificar si necesitan visa, dependiendo del país), timbres de aduana, todo eso en original y copias. Un  dato importante: las oficinas abren de 8 a 12 y de 2 a 5 y únicamente atienden de lunes a viernes.

Legalizados los papeles empezó un corto recorrido hacia San Cristóbal: La primera  buena sorpresa para los motociclistas: estamos en el país con la gasolina más barata del mundo: 0.06 USD por litro, en ese momento entendí porque allá tienen la costumbre de que el último en tranquear paga a todos.

La hospitalidad venezolana se vivió desde San Antonio y es que la presencia de varios clubs de motos venezolanos, hacía sentir que estábamos a pocos kilómetros del evento motero donde todos los tipos de maquinas: Superbikes, Custom, Doble propósito nos mezclábamos en un solo grupo.

Luego de la llegada a los diferentes hoteles, y la limpieza de rigor a las maquinas nos dirigimos al centro ferial ASOGATA (Asociación de Ganaderos del Táchira). Allí  nos recibieron en una organizada área de inscripción en la que se permitía pasar con nuestras maquinas por las mesas de registro. Dicen que la primera impresión es la que cuenta y aquí los organizadores se anotaron un gran punto pues se recibían pesos, dólares, bolívares y por supuesto tarjetas de crédito para cancelar la inscripción. Todo esto acompañado de la cordialidad de los Motociclistas de Táchira.

A pesar del cansancio del viaje, empezó la rumba, el Gocho Melo a cargo de la animación subía el ánimo de los asistentes: Una rampa que permitía subir las motos a la tarima, esto también fue una excelente iniciativa pues todos tuvimos la oportunidad de subir, saludar, recibir premios y porque no “figuretear” un poco para robar lente de los varios fotógrafos que se encontraban prestos para capturar las imágenes de asistentes.

El área de alimentos cubierta permitía deleitarse con varios platos típicos y otros típicos platos, puesto que había desde mazorca, chorizo, sanduches, hamburguesas, y muchas cosas más.

Al interior del centro también hubo dos carpas de venta de cervezas y otro par de casetas para licores fuertes, los precios no eran del todo elevados, sin embargo varios prefirieron comprar botellas en licorerías exteriores e ingresarlos al evento.

Alrededor del recinto decenas de stands con accesorios, ropa, tatuadores e incluso un mini taller de motos. Estuvieron presentes varios comerciantes de diferentes partes de Venezuela ofertando sus productos.

En tarima: la escenografía muy buena, al igual que el sonido, la presencia de fuegos artificiales y un par de pantallas laterales brindaban un entorno adecuado para la presentación de artistas.

La noche se desarrollaba sin novedad, cero incidentes, pura hermandad, cuando de pronto la música se suspendió a las 12:00 y acto seguido la voz del animador anuncio el término de las actividades del día debido a que los Comités Comunales así lo determinaron. Ante esta situación, la mayoría de personas salió a varias de las discotecas del área  y hubimos unos pocos que fuimos a los piques en el sector de Sambil (no eran parte de la programación), sin embargo estos finalmente no se realizaron porque éramos pocos los presentes en el sitio, lo que si hubo fue ánimo para seguir con la rumba.

El día sábado anunciaron abrir el evento a las 9:00, sin embargo los madrugadores debimos esperar un par de horas hasta que todos los stands abrieran y los kits del evento llegaran, pero no importó, esto fue aprovechado para departir entre los que estuvimos presentes y hacer nuevos amigos. Se evidencio nuevamente el porqué se llama a San Cristóbal “La ciudad de la cordialidad”.

En la tarde salimos hacia el Parque Nacional Chorro del Indio, el sitio está al este de San Cristóbal, siguiendo la vía Macanillo – Potosí; tiene alrededor de 17 hectáreas con una biodiversidad única, un verde permanente adornaba los excelentes paisajes, aquí se visitaron El Loma del Viento y finalmente la caída de agua “El chorro del indio”.

Desde la Loma del viento se tenía una vista fabulosa de San Cristóbal, las máquinas se calmaron por unos instantes para permitir respirar el aire puro y sentir ese viento que hacia flamear las banderas de los diferentes clubs presentes en el sitio. Al salir para el Chorro del indio, la lluvia se hizo presente, pero el calor de los amigos motociclistas pudo más y allí estábamos disfrutando de este sitio peculiar, motos vehículos de apoyo con equipos de música acompañaron a participantes.

Al retorno a San Cristóbal la lluvia volvió  para quedarse,  así que gran parte de los participantes fuimos a los hoteles a guardar las motocicletas y llegar al evento en taxis, era una buena oportunidad para disfrutar de la rumba y el buen licor venezolano: licor y conducción no son buenos amigos.

A pesar de la fría noche, en tarima la temperatura subió, la elección de Miss Motociclismo, bellas damas desfilando y con seductores bailes en la tarima causaron taquicardia en varios de los asistentes.

Los artistas en tarima estuvieron muy bien: Fabián Santamaría colombiano, sumado al talento de  Virus y Grupo Colon de Venezuela, hicieron los deleites de los asistentes.

En tarima se realizo merecido reconocimiento a los Organizadores, Motociclistas del Táchira, quienes se llevaron el aplauso de los presentes, también se realizo un emotivo minuto de silencio por los motociclistas caídos, luego del cual se escucho el rugir de las maquinas que retumbo en toda San Cristóbal. La noche se completo con un chévere espectáculo de fuegos pirotécnicos que ilumino el cielo de la bella ciudad.

La gente bailaba y disfrutaba en el centro de ASOGATA, la noche transcurría muy divertida y se tenía previsto rumbear hasta las 2:00 am , pero siendo las 12: 00 nuevamente un mensaje por los micrófonos diciendo que la programación había concluido dos horas antes de lo programado otra vez por requerimiento de los Comités Comunales. Pero ni siquiera esta arbitraria decisión, impidió que la mayoría de los asistentes continúe con los festejos en varios centros de diversión, y discotecas con los que cuenta esa linda ciudad.

El Domingo se anuncio la salida hacia Periobeca, un pequeño y mágico poblado ubicado a 30 minutos de san Cristóbal, la vía larga, ancha y con varios desniveles propios de la topografía nos llevo a un colonial pueblo fundado en el siglo 17 y que se desarrolla alrededor de la plaza Bolívar; visitamos La iglesia de la Virgen del Carmen y un sitio muy interesante de venta de artesanías denominado El Portal de Antaño, la tranquilidad de sus estrechas y empedradas calles fue acompañada por varias horas por el rugir de motocicletas que disfrutábamos del lugar.

La gastronomía del sitio muy agradable: platos a la leña, asados criollos, sancochos y unos dulces de primera; sin embargo dada la gran concurrencia, varios sitos de comidas se quedaron desabastecidos. Luego del almuerzo varios motociclistas salimos hacia otro sitio turístico llamado Parque Cristo Rey, ubicado en la Población de Capacho Nuevo, una estatua estaba erguida en medio de un parque donde varias personas hacían parrillas familiares y otras simplemente descansaban allí. En todas estas rutas los organizadores estaban pendientes de todos los motociclistas y ayudaban al tránsito de las caravanas.

De regreso a San Cristóbal a las 6:00 pm a disfrutar del tercer y último día del evento en ASOGOTA. En la noche, más grupos musicales y la presentación de videos del evento en las pantallas mantuvieron a los presentes atentos de las divertidas imágenes, grupos de Caracas, Valencia, Maracaibo, Guanare, San Antonio, Mérida, Barquisimeto, Bucaramanga y varias ciudades más unidos en un solo abrazo. Esta noche también se entregaron premios a  varios participantes: todos tuvimos nuestro espacio en este evento.

Siendo aproximadamente las 10:00 pm y en medio la lluvia, el evento concluyo con un abrazo y un hasta pronto de todos los que estuvimos presentes.

Me encantaría mencionar a todos quienes hicieron de este evento un éxito, pero son tantos que esta reseña quedaría corta, por eso me atrevo a decir que el evento fue genial gracias a TODOS, organizadores y participantes.

El lunes empezó el viaje de retorno; las vía Cúcuta – Bucaramanga estuvo interrumpida por cerca de 16 horas, pero el espíritu motero se vivió hasta el último segundo y junto con Johana Gómez, una valiente y decidida motociclista de Bucaramanga, logramos volver sanos y salvos a Colombia, pero paralelamente el esposo de Johana, José Velázquez, regresaba a Cúcuta gracias a la valiosa y desinteresada ayuda del  Club Zapegato de Caracas quien en su vehículo de abasto ayudaron a José a transportar su motocicleta hasta Colombia debido que la misma sufrió un incidente que gracias a Dios no afecto a su piloto.

Así termina esta aventura por tierras Venezolanas: teniéndonos juntos en la frontera, sentados en una misma mesa: Venezuela, Colombia y Ecuador, todos disfrutando momento a momento de esta bendición de ser motociclistas.

Lo positivo: La hermandad motera, la cordialidad de la gente del Táchira, la ayuda incondicional de los organizadores, el show, los paisajes.

Lo negativo: La lluvia, el trámite burocrático de ingreso, la suspensión del evento a causa de los comités.

Los números: Inscripción $45 USD, hospedaje $20 USD por persona en habitación doble.

Como resumen podrá haber criterios variados pero en lo personal concluyo tal y cual empecé esta reseña: Un Moto evento no se hace por la organización, por la cantidad de motos, ni mucho menos por los premios, el éxito depende de la buena energía, el ánimo para compartir sanamente, disfrutar y vivir esta pasión sobre dos ruedas.

Un moto abrazo…

Javier.

Aquí puedes ver la galería de fotos del 5to Gran Encuentro de Motos de Alta Cilindrada de San Cristóbal (Táchira – Venezuela) 2011. (Fotografías de German Corrales y Javier Goyes (Venezuela y Ecuador).
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